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Peter Gago, ¿quién decide el sabor de los vinos de Penfolds?

  • Redacción
  • 2004-02-01 00:00:00

Desde hace un año, Peter Gago, bodeguero jefe de la Casa australiana Penfolds, hace el vino de culto Grange. Se ha hecho cargo del puesto en una época tormentosa: en la Casa madre Southcorp hace dos años que amaga tormenta. Pero Peter Gago permanece sereno. Peter Gago: Enólogo jefe de Penfolds a su 46 años. Nació en el Reino Unido y llegó a Melbourne con sus padres en 1963. Después de terminar la carrera universitaria, trabajó primero como profesor de Matemáticas y Química. Ya entonces se interesaba por el vino. Cuando a mediados de los años ochenta comenzó el boom de los vinos australianos, se decidió a estudiar Enología en el Roseworthy Agricultural College. En 1989 llegó a Penfolds, donde trabajó inicialmente en el sector del vino espumoso. Cuatro años después cambió al vino tinto y trabajó en estrecha colaboración con el entonces chief winemaker, enólogo jefe, John Duval, cuyo puesto ha venido a ocupar en 2002. Ambos vinificaron no sólo una serie de vinos de garaje de añada, sino también desarrollaron nuevos vinos Superpremium como el RWT. Uno de los vinos favoritos de Gago entre la paleta que ofrece Penfolds es el Bin 389, una mezcla de Shiraz y Cabernet, en Australia también llamado «the poor man’s Grange» (el Grange de los pobres). Además, colecciona raros ejemplares de Penfolds: en su bodega guarda incluso algunas botellas del legendario Grange del 55, con la que el «inventor» del Grange, Max Schubert, fundamentó la extraordinaria fama de este vino. Peter Gago también es coeditor de tres libros enológicos. Rumores de traspaso, reestructuraciones, nuevos cuadros en la gerencia. Desde que la Casa madre Southcorp absorbió a su gran competidor Rosemount en 2001, se acabó la paz en la cúspide del consorcio. En estos momentos, ¿quién decide cómo han de ser los vinos de Penfolds? Puede estar seguro de que siguen siendo las características de los viñedos las que definen los vinos, y no las estrategias de los directivos. Lo que sucede a nivel de accionistas y dirección de empresa es una cosa y hacer vino, otra muy distinta. Para una empresa de prestigio como Penfolds, pensar en beneficios a corto plazo sería en cualquier caso la estrategia equivocada. ¿Penfolds es, entonces, la estrella del portafolios de Southcorp? Sí, podría expresarse así. Las valoraciones internacionales muestran que producimos vinos extraordinarios en todas las calidades. Y nos hemos posicionado con claridad: nuestro blend más asequible, el Rawson’s Retreat, cuesta diez euros. No nos movemos, pues, en el segmento más barato, en el que actualmente reina una competencia exacerbada, centrada en desplazar al competidor. Hoy ni las leyendas son intocables. Mondavi ha anunciado que utilizará su buen nombre para comercializar nuevos vinos muy asequibles. ¿Recibirá usted el encargo de crear un vino Penfolds de cuatro euros? No conozco tales planes. Penfolds siempre ha apostado por la continuidad y, hasta ahora, le ha ido bien. Yo mismo, por ejemplo, sólo soy el cuarto chief winemaker, enólogo jefe, desde 1948. A pesar de todo ello, el mercado cambia. Y, con él, posiblemente también Penfolds... La continuidad y la innovación no son excluyentes. Nosotros experimentamos con uvas de nuevas regiones vinícolas muy prometedoras, como Robe o Borderton, ambas en el sur de Australia. Hemos plantado variedades nuevas como la Pinot noir o la Sangiovese. Y les seguimos la pista a nuestros vinos para ver cómo maduran en barricas de roble ruso o húngaro. Estos experimentos, ¿han llevado ya a producir cambios en su paleta de vinos? Hemos retirado del mercado dos tipos tradicionales de Sémillon. Si bien esta variedad cuenta con una larga tradición en Australia, tiene escasa aceptación en la exportación. A cambio, vamos a lanzar por vez primera un excelente vino de Garnacha, Cellar Reserve Barossa Valley Grenache, por unos 35 euros la botella. Estoy convencido de que la variedad Garnacha aún no ha alcanzado su cenit cualitativo en el sur de Australia. Su predecesor, John Duval, abandonó esta empresa de manera bastante repentina... John había trabajado para Penfolds durante 28 años, 16 de ellos como enólogo jefe. Es uno de los personajes más conocidos del mundo del vino en Australia. Si ahora su deseo es dedicarse más a sus propios proyectos enológicos, ¿quién se lo va a censurar? Pero su partida ocurrió en un momento en el que aumentaba la fluctuación en el nivel directivo de Southcorp y los rumores de absorción se hacían cada vez más audibles. Es posible que la creciente inquietud en el mercado del vino australiano influyera en su decisión. No obstante, John sigue siendo consejero de Penfolds. Es decir, que en ningún caso puede hablarse de discordia. En España, el legendario Vega Sicilia está empezando a tener una enorme competencia y ya se ve obligado a compartir la fama con otros vinos. El Grange, por el contrario, sigue estando solo en la cúspide, por encima de los demás vinos superiores australianos. ¿Por qué? Es que el Grange ha hecho Historia. En un país vinícola que no tiene el pasado que pueden presentar Francia o Italia, esto tiene un significado muy especial. Su particular etiqueta es para muchos casi un emblema de Australia, algo así como Ayers Rock. Sin embargo, con la ayuda protectora de Robert Parker, también otros vinos australianos han alcanzado el estatus de vinos de culto, por ejemplo, el Shiraz Three Rivers de Chris Ringland o el Shiraz Duck Muck de Wild Duck Creek Estate. Hay que decir que éstos son más conocidos en los EE UU que aquí, down under. Además, se producen en cantidades increíblemente pequeñas y se basan en un concepto totalmente distinto al del Grange. ¿En qué reside la diferencia de concepto entre el Grange y los otros vinos de culto? Los vinos de culto franceses, españoles y cada vez más también los californianos son de un solo viñedo. El Grange, por el contrario, encarna el principio australiano de vino «multirregional». Lo que significa que las uvas con las que hacemos el Grange proceden de varios viñedos en diferentes regiones. Es el arte de la selección lo que lo hace especial. ¿Podría explicarlo más detalladamente? Al principio tenemos una serie de viñedos que consideramos «dignos del Grange». Allí vendimiamos la uva bloque a bloque, cada uno rigurosamente diferenciado. Las uvas de cada bloque se fermentan por separado en pequeñas tinas abiertas. Después, todas estas diferentes partidas maduran en barricas nuevas de roble americano. Por último, en un minucioso proceso de cata, para el Grange seleccionamos de las barricas aquellos vinos cuya calidad nos ha convencido plenamente. Todo esto tiene un cierto parecido con la creación de un Champagne de añada. Lo que se vende al final como Grange quizá llegue, como mucho, al cinco o al ocho por ciento de lo que originariamente teníamos pensado. Según el año, producimos entre 50.000 y 100.000 botellas. Cuando se tiene tal Cuerno de la Abundancia del que extraer, en realidad, nada puede fallar... Considérelo desde el punto de vista opuesto: vinificar un Romanée-Conti posiblemente sea sencillo, pues desde el principio está claro de qué viñedo estará hecho el vino. El Grange, por el contrario, no existe antes de la vendimia. Adquiere los primeros rasgos irreales después. Dicho de otra manera, reinventamos el Grange cada año. Y créame, es algo que puede llegar a poner muy nervioso. Supongo que estará muy cansado de que le pregunten acerca de el estilo «culturista» de algunos vinos australianos. Esa discusión no tiene sentido. La verdad es mucho más banal: en todas las regiones del mundo hay vinos buenos y malos, interesantes y poco interesantes. Cuando en 1995 lanzamos por vez primera el Shiraz superior RWT, todo el mundo hablaba de un vino de inspiración francesa. De hecho, está elaborado según la filosofía francesa y madura sólo en barricas de roble francés. No obstante, en las catas comparativas resulta más opulento, lleno, especiado y con más aromas de bayas que nuestro Shiraz St. Henri. Éste se hace a la manera australiana, pero encarna más bien el estilo europeo, carnoso y masculino. ¿Ha quedado ya todo claro? (thomas.vaterlaus@vinum.info)

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