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VINUM 30 años

  • Redacción
  • 2010-12-01 00:00:00

Enero |1980 «Era pura afición» El primer número fue obra de un puñado de entusiastas. Con poco dinero y mucho corazón, los fundadores acertaron en el nervio de su época. Rolf Kriesi (1937-2000), fundador y primer editor de VINUM. De aficionado a entendido en vinos, así rezaba el título del primer editorial de VINUM. Un título que encaja bastante bien con nuestra historia. “Era una pura afición”, comenta Roland Bärtsch, cofundador y durante muchos años maquetador de VINUM. Cuando nació la idea, Bärtsch estaba sentado con sus colegas del ramo de la publicidad y medios de comunicación en un local tradicional de Zúrich llamado Tobelhof. Rolf Kriesi, el verdadero padre fundador, con su idea de una revista de vinos independiente suiza, no sólo acertó en el gusto de sus comensales, sino también de un amplio sector de la población. Ya en su primera aparición, la acogida en el mundo del vino y entre los lectores fue magnífica. Y todo ello sin ningún concepto de marketing. La publicidad boca a boca había colaborado en dar un fulminante pistoletazo de salida a VINUM. “Leer VINUM formaba parte del buen tono, primero entre los publicistas, pronto entre los dentistas, médicos y otros académicos.” Corifeos como colaboradores Kriesi, Bärtsch y sus compañeros de armas eran amantes del vino, pero aún no eran entendidos en aquel entonces. “Para el primer número, todos trabajamos voluntariamente”, confiesa Bärtsch. Y todavía muchos años después, VINUM sólo pudo seguir existiendo porque había gente que se dejaba la piel sin recibir remuneración. Había otras cosas más importantes: “El placer del vino y el placer de hacer VINUM. Nunca pensamos que fuera un gran negocio”. VINUM ha sido independiente desde el principio, algo que era casi lo más importante para los fundadores, Rolf Kriesi y Roli Bärtsch. “Aunque en ocasiones estuvimos en puertas de la bancarrota.” Al principio, incluso se compraban los vinos que se cataban. En lo que respecta a los medios de comunicación y estrategias, los fundadores de VINUM eran profesionales, y para el campo del vino pudieron contratar corifeos ya desde el primer número. Walter Eggenberger, entonces campeón de cata de Europa y director de la Escuela Profesional de Agricultura para el Cultivo de Fruta y Vid de Wädenswill, reveló en el primer número cómo se desarrolla una cata profesional. También a Eggenberger se le nota en su primer artículo el entusiasmo por el proyecto. “Nos unía a todos”, recuerda Bärtsch. “Creo que fue la premisa más importante para el éxito de VINUM.»u0008Benjamin Herzog Julio |1985 La maldición del Retsina Grecia “Imbebibles” era el veredicto para los vinos helenos. Nosotros demostramos lo contrario. Siempre hemos tenido debilidad por los incomprendidos. Así, en 1985 fui por primera vez a Grecia, que entonces tenía el sambenito de la mala imagen del Retsina aromatizado con resina de árbol. El viaje me llevó desde Tesalónica hasta Creta y estuvo acompañado por vinos tintos sorprendentemente buenos (“no chemikalia”, comentaba un viejo desdentado en el pueblo montañés de Rapsani), vinos blancos generalmente oxidados y un vino con casta que un sofisticado vinicultor de Patras había elaborado con una parte de uvas verdes y pequeñas. Sorpresa: ¡VINUM ya estaba allí! En casa de Georg Tsantalis (foto de archivo de 1985 arriba a la izquierda), el bodeguero jefe de la bodega Tsantali, que había hecho el doctorado en Alemania, sobre su escritorio estaba el número de abril de 1985. “Hace tiempo que estoy suscrito”, nos contaba este elegante gerente mientras nos guiaba por la nueva bodega. Diecinueve años después, me nombró socio honorífico de la asociación de vinicultores griegos y proclamó en Atenas: “Este periodista nos ha echado algún rapapolvo. Pero tenía razón.” u0008Rudolf Knoll 1980 Michel Rolland inicia su actividad como asesor en la “orilla derecha” de la región de Burdeos. En los años que siguieron, se convirtió en el pionero del estilo moderno del vino de Burdeos, de color intenso, fruta madura, abocado de extracto y marcado por el roble. 1980 En noviembre, el número cero de VINUM ve la luz del día. En diciembre sale al mercado el primer número. 1982 El crítico inglés Hugh Johnson considera el Sassicaia de Marchese Incisa della Rocchetta, un varietal de Cabernet Sauvignon, como el mejor vino de Italia, “Italy’s Best Wine”. En los años siguientes, las cifras de ventas se disparan y el Sassicaia se convierte en el prototipo de supertoscano. 1983 El australiano David Hohnen degusta por primera vez un Sauvignon Blanc de Nueva Zelanda. Con la fundación de la finca Cloudy Bay en Marlborough, se convierte en el pionero del muy aromático Sauvignon del Nuevo Mundo. 1983 VINUM se publica por primera vez con una edición exclusiva para Alemania. 1985 El escándalo del fraude del vino adulterado con glicol precipita a la vinicultura austriaca a una profunda crisis. Habiendo aprendido de sus errores, surge “el milagro del vino austriaco”. 1985 Primer campeonato de cata en Suiza. Hans Massler, gerente de un restaurante de autopista Mövenpick, donde no se sirve alcohol, gana con holgura. 1985 Se subasta un Château Lafite de la bodega personal del presidente de EE UU Thomas Jefferson, adjudicado por 156.450 dólares. Hasta la fecha, sigue en entredicho si el vino más caro del mundo es o no una falsificación. 1987 Se convoca por primera vez el Premio al Vino Tinto Alemán. Los vinicultores alemanes presentan 300 vinos; actualmente participan cuatro veces más. 1988 Con el barón Philippe de Rothschild fallece quizá el personaje más relevante del mundo del vino del siglo XX. Rothschild introdujo el embotellado en la finca, mise en bouteille au château. 1988 Maison Drouhin es la primera de las casas comerciales legendarias que invierte en una segunda empresa en el Nuevo Mundo. Domaine Drouhin produce Chardonnay y Pinot Noir en Oregón (Estados Unidos). 1989 Los vinicultores René Barbier, Álvaro Palacios, José Luis Pérez, Dafne Glorian y Carlos Pastrana vinifican su primera añada de vino del Priorat con uvas de Cariñena y Garnacha de más de cien años, regalando así a esta región un espectacular renacimiento. 1989 Se concede por primera vez el premio al mejor productor de Riesling. Desde entonces, este concurso se convoca cada dos años. 1990 John Alban lleva a California sus primeras selecciones de variedades del Ródano (Syrah, Roussanne, etc). A raíz de ello surge en Central Coast el Movimiento Rhône Rangers. 1990 Se disputa por primera vez la Coupe Chasselas. VINUM fomenta así la fama de esta importante variedad de uva suiza. 1991 Jean-Luc Thunevin y su mujer, Murielle Andraud, vinifican por vez primera en Saint-Émilion 1.500 botellas de su Château Valandraud. Su finca pasa a la historia como la primera bodega de vinos de garaje. 1991 En Sotheby’s se subastan cientos de botellas de vinos raros de la finca Massandra, que perteneció al zar Nicolás II. Los críticos de vinos se entusiasman con la calidad de los vinos dulces, que se remontan hasta la añada de 1830 y han sobrevivido ilesos durante la época comunista. 1991 Se publica por primera vez la edición francesa de VINUM. 1992 George Duboeuf lanza el Beaujolais Nouveau en Francia, Estados Unidos y también Asia. La costumbre local de beber vino del año al final de la vendimia se convierte en una campaña de marketing a nivel mundial. Pero para entonces, ya había pasado el auge del movimiento Nouveau. 1993 En Sudáfrica, el periodo de cambio tras la liberación de Nelson Mandela (1990) dio alas a la vinicultura. Desaparece el monopolio de la cooperativa de vinicultores KWV. Gracias a los inversores extranjeros y al constante aumento de la exportación, se produce un boom de la vinicultura. 1995 La región húngara de Tokaj es la primera región vinícola del antiguo bloque del Este que prospera espectacularmente tras la caída del Muro de Berlín (1989). Todo ello gracias a inversores extranjeros como el grupo francés Axa Millésimes, propietarios de la finca Disznókö. 1997 El vinicultor del Loira Nicolas Joly publica su libro Vin du ciel à la terre. Este libro provoca una espectacular popularización de la vinicultura biodinámica, que se rige según la filosofía antroposófica de Rudolf Steiner. 1997 Se publica por vez primera la edición española de VINUM. 1998 Los análisis de ADN realizados en la Escuela de Enología de Klosterneuburg demuestran que la variedad Müller-Thurgau no es un cruce de Riesling y Silvaner, sino de Riesling y Madeleine Royale. En los años siguientes, los estudios de ADN desvelarán la procedencia de muchas más variedades. 2000 Durante los preparativos de las festividades del cambio de milenio, las ventas de champán alcanzan un récord absoluto. Desde entonces, la superficie cultivada ha aumentado en alrededor de tres mil hectáreas. Se decide aumentar también el número de comarcas vinícolas, de las originarias 301 (en 1993) a 357. 2001 El empresario suizo de vinos Donald Hess se hace cargo de la bodega Colomé, en la provincia argentina de Salta, y planta viñedos nuevos a una altura de hasta 3.111 metros. Colomé es, pues, el viñedo más alto del mundo. 2002 En el brasileño Rio São Francisco, cercano al paralelo 8, se cultivan los vinos más próximos al ecuador. Gracias a su clima estable, seco y caluroso, es posible vendimiar dos veces al año. Se vendimia sin cesar. La calidad de algunos vinos ecuatoriales es sorprendentemente buena. 2002 Coincidiendo con la llegada del euro, VINUM se viste con el apellido de «revista europea del vino». 2003 Una ola de calor inusualmente fuerte causa serios problemas a los vinicultores de Europa. Incluso en Alemania y Suiza, los vinicultores se ven obligados a añadir acidez artificial a sus vinos. Por primera vez se habla a un nivel más amplio sobre los efectos del calentamiento global en la vinicultura. 2004 OpusWine organiza la Séptima Edición de Primer, un salón ya totalmente afianzado. 2004 La familia Mondavi vende su bodega a Constellation Brands. Así acaba la historia del éxito comercial de Robert Mondavi, figura simbólica del Nuevo Mundo del vino. La adquisición de la bodega de Mondavi se convierte en símbolo del proceso de concentración de la industria internacional del vino. 2004 Aparece la primera edición de VINUM en italiano. Lamentablemente, sólo un año después de su lanzamiento, ha de suspenderse, aunque renace tiempo después con periodicidad anual. 2005 La película Entre copas, de Alexander Payne, llega a los cines. El personaje de Miles, el melancólico amante del Pinot Noir, logra que en el mundo entero crezcan los adeptos a esta variedad tinta borgoñona. 2005 Se publica el número 100 de la revista gratuita MiVino, Los vinos de MiVino, con una particular selección de las catas publicadas en la publicación hasta esa fecha. 2006 El periodista británico especializado en vinos Steven Spurrier repite el legendario “Jurado de París” de 1976, en el que los vinos californianos lograron una calificación superior a la de sus modelos franceses. Y en esta repetición de aquella cata con las mismas añadas (1967 a 1973), los vinos franceses tampoco lograron ninguna ventaja. 2006 La Asociación de la Prensa Suiza concede a VINUM el Q-Award. Esta distinción se concede a revistas especializadas por su mérito y excelencia. 2008 Sexta edición del Salón Vinoble, última de la mano de OpusWine, creadora de la idea original del evento y su impulsora durante una década. 2009 Intervinum entra en el accionariado de OpusWine, con lo que se refuerzan aún más los lazos internacionales entre la edición española y la casa madre. 2010 Según el libro Guiness, el vino más antiguo aún bebible se halla en la bodega del Bürgerspital en Würzburg. Se trata de una añada de 1540 de Würzburger Stein. Noviembre |1985 La catástrofe de Austria Era sencillo poner en la picota a los responsables del escandaloso fraude del anticongelante. El taxista estaba horrorizado. Cuando oyó que quería ir al Burgenland, me preguntó atónito: “¿Pero es que quiere envenenarse?” En 1985, la actitud del público ante los vinos austriacos era histérica. Diariamente salían en los medios listas de vinos mezclados con glicol. La palabra veneno dominaba los titulares. La exportación se derrumbó. Y eso que la sustancia añadida por unos aprovechados a los vinos con poco cuerpo para mejorarlos era menos peligrosa que el propio alcohol. Nadie se puso enfermo y, por supuesto, no hubo ninguna muerte (como un año después en Italia con los vinos que contenían metanol, que fueron desplazados de los titulares por el desastre de Chernóbil). Cuando indagamos, el Ministerio de Sanidad de Austria nos comunicó que “no existía peligro grave”. VINUM, tras documentarse intensamente in situ, tituló: “La oportunidad que brinda la crisis” y aclaró que los de Ruster, que aparentemente eran los más afectados, no tenían nada que ver con el fraude, sino que sufrían bajo una Ley del Vino que hacía agua por todas partes. Sacamos a la luz un sistema de ventas en el mercado negro con certificados falsos para vinos de hielo y TBA (Trockenbeerenauslese), así como la extendida costumbre de mezclar. Así, el número de vinos con glicol ascendió tremendamente y por último, debido a las mezclas, alcanzó también al vino alemán. En 1986 Austria puso en vigor una nueva Ley del Vino, que es una de las más rigurosas del mundo. Hoy Austria está en una posición magnífica: está claro que aprovecharon la oportunidad brindada. Rudolf Knoll Julio |1986 La seducción del champán La verdad desnuda en la portada y en las páginas del número de verano de 1986 soliviantó los ánimos de los lectores. El entonces director lo recuerda. «Yo no soy una cuentista”, decía en el editorial del número del escándalo mi muchacha del Champagne, Louise, que no era una de las modelos de portada de Willi Rieser, sino azafata de Pommery. “Y por eso no le voy a contar ahora cuántos kilómetros de longitud tiene nuestra bodega, ni cuántas decenas de miles de botellas descansan en ella. Tampoco le voy a decir de qué ensamblaje de vinos base hacemos nuestro Cuvée Prestige. Ni sabrá usted por mí qué porcentaje de dosage añadimos a nuestro champán. Porque todo eso lo puede leer en un libro de texto. Pero tampoco aprenderá gran cosa. Porque el secreto del champán, como dijo con acierto O., no se lo puede llevar a casa escrito en un papel.” En realidad, el que tiene la culpa de todo es O., a quien debo, como tantos otros periodistas del mundo del vino, la iniciación a los secretos del champán. O. estaba convencido de que, en realidad, aquello en lo que reside la belleza del champán sólo puede expresarse a través de la poesía. “El cerebro de los mecánicos de la belleza que hoy día escriben sobre vinos, evidentemente, no da para tanto”, se acaloraba, “porque lo que han aprendido en el colegio son nombres y cifras y la hábil combinación de ambos”. Intenté tranquilizarlo: “Ya sabe usted, O., que no pretendo escribir una enciclopedia sobre el champán...” Pero aun así, no le confesé que estaba planeando con el fotógrafo Hans-Peter Siffert una especie de historia fantástica ilustrada, muy alejada de toda convención periodística. Tuve que pagar muy caros mis devaneos. El que luego sería el primer Master of Wine de Suiza, Philipp Schwander, describió mis esfuerzos literarios como “un vuelo rasante kafkiano”, y un comerciante de vinos de Alemania los despachó sin consideración como la “insulsa y aburrida redacción de un colegial reprimido que se sueña en horizontal sobre las pistas de baile”. A otros pareció gustarles más la “poética historia sobre el champán”, algunos incluso hablaban de mi “pequeño relato”. El toma y daca de las cartas al director se prolongó durante nada menos que cuatro números, hasta que un lector puso el decisivo punto final: “¿Necesariamente tengo que beberme el champán con una señorita ligera de cascos? Como no me van las mujeres, sólo me queda una alternativa: disfrutar de un Riesling espumoso con un hombre interesante”. Andreas Keller “¿Están disponibles los números de teléfono de esas chicas?” Carta anónima al director(Sabemos su nombre, pero no vamos a publicarlo...) Julio |1987 Justicia más que clemencia Sur del Tirol Así desairamos a los vinicultores del Alto Adige. Hoy nos están agradecidos por hablar claro. Visitamos el sur del Tirol en 1999. Un vinicultor asistente a la reunión empieza a rebuscar entre su archivo de revistas y me presenta un número de VINUM muy usado del año 1987. “Esto nos hizo daño”, dice acerca de la portada, en la que se ve una copa volcada y el titular Sur del Tirol: caído en desgracia. Vaya, ahora va a haber bronca, piensa el invitado. Pero ocurre justo lo contrario. “Este artículo nos hizo despertar. Empezamos a concentrarnos en la calidad. Hoy estamos en mejor posición que hace doce años”, resume el vinicultor y escancia otra copa de Vernatsch. Aquel año criticamos las vendimias masivas entonces habituales y los vinos sin expresión, que a menudo ni siquiera procedían del sur del Tirol. Las consecuencias fueron: caída de precios, desplome de la exportación y graves problemas de imagen. Hoy el sur del Tirol está muy lejos de aquella situación y cada vez más cerca de los vinos superiores que es capaz de producir esta región. Las cooperativas y las bodegas privadas, haciendo un sensacional esfuerzo de voluntad, han logrado sacarse a sí mismos del embrollo. u0008Rudolf Knoll Marzo |1987 ¿Cuánta suciedad aguantamos? Las uñas sucias de tierra del viñedo molestaron a algunos lectores. Y habló claro el fundador de VINUM, Rolf Kriesi. En favor de la tierra. Para una revista, las controversias más susceptibles de crear prestigio suelen ser las más inesperadas y proceden de donde menos se sospecha. En marzo de 1987, la redacción puso en la portada la fotografía de la mano de un vinicultor sosteniendo una copa de vino. Bajo las uñas eran claramente visibles restos de tierra del viñedo. Una serie de cartas al director criticaron esta “imagen antiestética”. Naturalmente, al entonces editor de VINUM Rolf Kriesi no le pasó inadvertida esta invitación a la polémica. En el número de mayo, contestó categóricamente a los críticos en su editorial: “¿Acaso nos hemos apartado tanto de los orígenes del vino que hemos olvidado las manos a cuyo trabajo se lo debemos? ¿Nos hemos desligado de tal modo de la naturaleza que la tierra se ha convertido en suciedad? ¿Y esas manos se nos han vuelto tan repugnantes que no es recomendable mostrarlas? No, no nos avergonzamos de la foto de esa portada. Al contrario. ¡La tierra es valiosa!”, escribió Kriesi. ¡Y vaya si impactó! Porque a raíz de ello, VINUM recibió aún más cartas al director apoyando su actitud tan clara y definida. ¿Y en la actualidad? ¿Qué reacciones provocaría una mano de vinicultor como aquélla en la portada de un número de VINUM en pleno siglo XXI? Probablemente ninguna. Porque no sólo la cultura del vino, sino también la estética fotográfica ha evolucionado en los últimos treinta años. Si entonces se esperaba de la fotografía que mostrara únicamente lo bello, que retocara todo lo molesto hasta hacerlo desaparecer, en la actualidad vivimos en la época del hiperrealismo. El mundo se muestra tal y como es, lo denostable es mirar hacia otro lado. Un poquito de tierra bajo las uñas se percibiría, si acaso, como expresión de lo auténtico. Para provocar hace falta algo más: por ejemplo, manos que tiran en una cuba virutas de roble o polvos aromatizantes... Thomas Vaterlaus Noviembre |1991 Sin miedo a los peces gordos Si es necesario, se pasa a la ofensiva: cuando se trata de los intereses de vinicultores y aficionados al vino, VINUM siempre ha estado dispuesto a arriesgarse a soltar una fresca. En 1991 se le acabó la paciencia al editor de VINUM, Rolf Kriesi. “Es usted, estimado señor ministro, el máximo patrocinador del vino suizo. Es imperativo que se dé cuenta de que nuestro comercio del vino navega hacia la catástrofe. Ésta no se puede remediar con un tibio y recalentado estatuto para la viticultura que pretenda contentar a todos”, escribió en su editorial Dirigido al jefe”, el ministro Jean-Pascal Delamuraz. Los antecedentes: entre 1976 y 1991, a cosechas escasas sucedían otras gigantescas, a veces se agotaban las existencias, a veces rebosaba el stock. La vinicultura suiza, que el proteccionismo había vuelto indolente, se veía indefensa ante las turbulencias. Creando una falsa escasez, los grupos de presión controlaban los precios, la oferta y la importación. La raíz del problema estaba en las laxas bases legales. Y tampoco la nueva Resolución sobre Viticultura, que entró en vigor el 1 de enero de 1993, iba lo bastante lejos, ni con mucho, para las expectativas de los preocupados por la calidad. El volumen de cosecha máximo permitido era demasiado alto y el contenido mínimo de azúcar tan escandalosamente bajo que hacía necesaria una modificación de la reglamentación sobre productos alimenticios. Más tarde, por fortuna, la mayoría de los cantones cambiaron siguiendo una sugerencia de VINUM y endurecieron las reglas voluntariamente. En 2007, la Reforma Agraria AP2007 sustituyó a la Resolución sobre Viticultura y el 1 de enero de 2008 fue introducida en toda Suiza la denominación de origen controlada AOC. Sus fundamentos se apoyan ampliamente en los de la UE, y todavía en la Resolución de 1993 . Barbara Meier-Dittus Junio |1991 Ayudas para el desarrollo en el Este Cata de vinos jóvenes en Alemania Oriental A la antigua RFA le faltó confianza. Cómo VINUM ayudó en el nacimiento. «¿La última añada de la RFA?”. Ya en mayo de 1990, poco después de la caída del Muro de Berlín, nos hacíamos esa pregunta. Todavía no era previsible que en octubre llegaría la reunificación de las dos Alemanias. Las cuatro empresas entonces dirigidas por el Estado junto al río Elba, en Saale y en Unstrut (Cooperativa Meissen, Cooperativa Freyburg, Finca Propiedad del Pueblo Maumburg / Bad Kösen y Radebeul), de repente, tuvieron que reubicarse en la economía de mercado, frente a una competencia a la que no estaban habituadas. La empresa de Bad Kösen, viéndose en apuros, vendía vino de Rheinhesse en su recién abierta tienda de vinos Vinum (inspirada en nuestra revista)... nos sentimos un poquito padrinos. Por eso propusimos a las fincas organizar una presentación conjunta del cuarteto del Este con vinos jóvenes. El 8 de marzo de 1991 todo estaba preparado en Bad Kösen. Habíamos invitado a funcionarios del vino de Alemania Occidental que, tras catar 60 vinos, alentaron a los productores a continuar. En la 20ª Cata de Vinos Jóvenes de Sajonia y Saale-Unstrut, en abril de 2010 en Freyburg, algunas decenas de vinicultores presentaron más de 160 vinos. Rudolf Knoll Mayo |1992 La imagen del escándalo A Alain Brumont no le pareció muy divertido verse reflejado como matarife en la revista. Hoy se ríe, pues aquel reportaje lo catapultó a la fama. Pedí por primera vez un Madiran de Brumont en un restaurante en el suroeste de Francia: Domaine Bouscassé 1982. Algo rústico, no precisamente concentrado, pero de una aromática fuera de lo común. Un año después volví a oír hablar de él. En Burdeos, un propietario de finca vinícola bromeaba sobre un campesino del suroeste que plantaba maíz y ahora hacía vino, y que había transportado en helicóptero algunas barricas de su añada de 1987 a una cumbre de los Pirineos. Se reía de la torpeza de su campaña publicitaria. Pero hoy sabemos que no había tal campaña. Brumont, sencillamente, quería averiguar si la altura tenía efectos positivos en la crianza. Mi primer encuentro con Alain Brumont fue una gran decepción. El hombre apenas abría la boca. Pero aun así supe que había pedido un crédito para comprar, sin la bendición de su padre, un castillo semiderruido llamado Montus y que por ello lo habían puesto de patitas en la calle; que no apostaba por las variedades de Burdeos, como todos los demás en esa región, sino por una variedad local llamada Tannat; que criaba sus vinos en barricas nuevas, aunque esto casi le costó la AOC, pues no era típico de Madiran; que había hecho talar una enorme vereda en el bosque para dirigir el viento hacia una ladera plantada de cepas donde las uvas maduraban para una vendimia tardía recién creada. Y algunas locuras más. En mayo de 1992 nos dirigimos una vez más a Maumusson. Brumont se había olvidado de la cita y estaba ilocalizable. Me dieron una habitación y me dijeron que el Maestro estaría levantado al día siguiente desde las cinco de la mañana y muy ocupado todo el día. Al alba me despertó un griterío, salí medio dormido al patio y fui testigo de un ritual que habría de hacer historia: con un cuchillo de matarife, Brumont estaba matando tres enormes cerdos y despiezándolos con habilidad. La sangre humeante se recogía e inmediatamente se mezclaba con cebollas, especias y otros condimentos, para luego rellenar intestinos con la mezcla y cocerlos en una olla de caldo: al día siguiente, me fui a casa con una morcilla fresca en la maleta. Después de publicarse el artículo, Brumont montó en cólera: “Lo habíamos intentado todo para apartarnos de la imagen del campesino provinciano, y va VINUM y publica una foto así en la revista. Lo que entonces no podía sospechar era que, después, la demanda se dispararía en el ámbito de habla alemana, ¡y Suiza se convirtió en nuestro mercado más importante! u0008Rolf Bichsel «Lo habíamos intentado todo para apartarnos de la imagen del campesino provinciano, y va VINUM y publica una foto así en la revista.» Alain Brumont Vinicultor Noviembre |1995 El golpe de los cuatro fantásticos Revolución en el Priorat Un valiente cuarteto de vinicultores buscó fortuna en el Priorat y provocó un enorme boom de esta región. Pero la prosperidad repentina también es peligrosa. Todavía está por saber si estos cuatro personajes realmente eran tan amigos como han entrado en la historia de la vinicultura. Lo cierto es que hacía falta valor para trasladarse en 1989 a la aislada región montañosa del Priorat, con sus pueblos abandonados donde sólo quedaban los que eran demasiado viejos para volver a empezar en otro lugar. Y algunos cazadores temerarios que en otoño le disparaban a todo lo que se movía. Pero René Barbier (Clos Mogador), Álvaro Palacios (Clos Dofi), José Luis Pérez (Mas Martinet) y Carles Pastrana (Clos de l’Obac) habían visto los suelos de pizarra y las cepas de más de cien años. Inmediatamente se dieron cuenta de que allí podían crecer vinos como nunca se habían visto en España. Por eso restauraron las viejas terrazas plantadas de vid, que antaño habían producido esos vinos tan alcohólicos con los que los vinicultores del norte de España corregían sus vinos. Cuando VINUM informó por primera vez en noviembre de 1995 acerca de “los cuatro duendes”, el boom del Priorat estaba a punto de estallar. Rara vez el mundo del vino ha experimentado un auge tan espectacular, que además ha tenido consecuencias duraderas: las variedades de uva que antes se desdeñaban, como la Garnacha y la Cariñena, fueron rehabilitadas en muy breve tiempo. Y no es de extrañar, viendo los elixires tremendamente concentrados que producían estas viejas vides. Pronto les siguió una segunda generación de recién llegados, entre ellos gente de renombre como el cantautor catalán Lluís Llach (su Vall Llach se cuenta hoy entre los crus superiores), que había vivido en el exilio durante la época de Franco. Después llegaron los inversores, los oportunistas y los especuladores, trajeron grúas de la construcción y las bodegas surgieron de la tierra como setas futuristas. En la pequeña localidad de Falset, los vinicultores y sus jóvenes becarios de Tokio, San Francisco y Burdeos se daban cita en locales de diseño, tan modernos como los de Barcelona. Pero crecer demasiado deprisa es peligroso. Muchos de estos vinos, pesados como transatlánticos, con más de un 15 por ciento de alcohol y color violeta-negro, que se producen en ya más de cincuenta bodegas, ahora están almacenados y son difíciles de vender. Mucho alcohol resulta sospechoso hoy en día, y hay numerosos fanáticos del vino malcriados que no resistieron la tentación de volverse hacia las nuevas regiones de moda. Lo que necesita el Priorat, después de quince años turbulentos, es una fase de consolidación. Thomas Vaterlaus «Las modas van y vienen. Yo me lo tomo con tanta calma como mis cepas. Ellas y yo sabemos que fue un acierto venir aquí.» René Barbier Vinicultor España 1 |Junio 1997 Nace la estrella del sur En español El proyecto se sirvió en bandeja. El hoy director gerente, Heinz Hebeisen, suizo largamente afincado en España, urdió los lazos y la coordinación internacional. El editorial de aquel número 1 de VINUM España era tan claro en la filosofía como entusiasta en la ilusión. Para la editora española, OpusWine, que venía produciendo la original revista MiVino, parecía un sueño que una de las mejores revistas especializadas del mundo, con ediciones en francés, la lengua dominante del vino, y en alemán, la de sus fundadores en Suiza y Alemania, pasara a expresarse también en español, el medio de comunicación de 400 millones de habitantes de este planeta y de numerosos países y zonas vitivinícolas. Por primera vez, el panorama vitivinícola de España se podía reflejar hacia el mundo en este medio en su propia lengua. Y a la vez, los profesionales, los curiosos catadores, los aficionados abiertos, que estaban creciendo y multiplicándose, podían asomarse al exterior de la forma más fácil y eficaz no sólo en español, sino con la selección de temas y focos centrada en sus propios intereses, elaborada y conducida por reconocidos profesionales, comunicadores, catadores que, como españoles, compartíamos esos intereses. Era el vínculo que plasmaba lo mejor de la globalización: el vino sin fronteras. Pero para que ese término no resultara confuso o equívoco, para no confundirlo con un camino hacia la homogeneización y los patrones comunes, ese primer número de VINUM en español se centró en lo primero que define a los vinos con personalidad, el terruño. La base que define vinos singulares, diferentes, irrepetibles, los que expresan a voz en grito su origen. Y no hay que olvidar que “original” viene de “origen”. El artículo, que hoy parece tema archisabido, supuso en su momento un texto de referencia para los lectores, sobre todo para los propios productores bodegueros de todas las Denominaciones de Origen que se convertirían en suscriptores de por vida. La presentación en sociedad se celebró por todo lo alto, es decir, en la terraza restaurante que corona el edificio ABC de Madrid, con asistencia de los responsables de la cabecera internacional -el desaparecido editor Rolf Kriesi- y el equipo naciente, bajo la dirección de Carlos Delgado, que disfruta de su jubilación desde hace un par de años. Fiel a sus principios, que simbolizaba en la imagen de su primera portada, VINUM ha sido en España una ventana abierta al mundo. Ana Lorente “Porque el vino debe ser, ante todo, manifestación del terruño, de la cepa en su circunstancia. De ese terruño al que, con la cepa y su viticultor, como no podía ser menos, dedicamos la portadda de nuestro primer número” Editorial del primer número de la edición española de VINUM España 2 |Octubre 1997 Nos equivocamos con la Pinotage Sudáfrica está de moda. Ése era nuestro mensaje en 1997. Entonces los vinicultores apostaban por la Pinotage. Hoy sabemos que en El Cabo pueden tener más éxito otras variedades. Los vinicultores y los jugadores de rugby, en los últimos años del apartheid, eran algo así como compañeros de penurias. Los musculosos jugadores de pelota, debido al boicot mundial, estaban excluidos de todos los torneos internacionales. Y nadie quería saber nada de los vinos sudafricanos. Después de la puesta en libertad de Nelson Mandela y el fin del apartheid, los jugadores de rugby y los vinicultores pudieron volver a subirse al escenario internacional. Ambos aprovecharon su oportunidad. Cuando VINUM publicó por primera vez en 1997 un gran reportaje sobre el nuevo mundo del vino en El Cabo, esta región ya estaba en el séptimo cielo. Thelema con su Chardonnay, Mulderbosch con Sauvignon Blanc, Hamilton Russel con Pinot Noir y sobre todo Kanonkoop con su Pinotage eran los que volaban más alto. Beyers Truter, ya entonces vinicultor legendario, decía con aplomo: “Con las variedades internacionales, como mucho, podemos poner acentos. Pero la Pinotage es nuestra mejor baza, para nosotros será aún más relevante que la Zinfandel en California”, aseguraba firmemente. Actualmente sabemos que las altas expectativas suscitadas por este cruce entre Cinsault y Pinot Noir no se han cumplido. Muy pocos Pinotage han resultado plenamente convincentes en cuanto a la calidad, demasiados de estos vinos se presentan con poco cuerpo, ásperos y poco equilibrados. Pero los vinicultores de Sudáfrica han tenido éxito con otras variedades. “Los ensamblajes de variedades bordelesas funcionan magníficamente en El Cabo. Los vinicultores no tienen más que elegir: pueden pulir su Cabernet a la recia manera francesa o bien al estilo plenamente frutal y noblemente especiado del Nuevo Mundo. Y ennoblecidos con algo de Syrah, Garnacha o Cinsault, confieren a sus mezclas una pizca de encanto sensual”, asegura el flying winemaker alemán Bernd Philippi, que asesora en El Cabo a la finca Mont du Toit. Hay otra cosa que nadie habría creído posible cuando visitamos esta región hace trece años: la Chenin Blanc, que entonces sólo se producía a granel para el mercado interior, está celebrando éxitos en la exportación. Con una minuciosa selección de las uvas, se producen vinos crujientes y frescos con una magnífica aromática de frutas tropicales. Tras la primera fase de euforia a mediados de los años noventa, la vinicultura sudafricana experimentó un pequeño desplome cualitativo. Pero desde hace diez años, una segunda generación de vinicultores ha impulsado una nueva dinámica. Vinos tintos como Fusion V, de De Toren, un ensamblaje clásico de Burdeos; el Columella de Eben Sadie Family (un ensamblaje del Ródano de Syrah, Mourvèdre y Grenache), o bien el Chocolate Block, de Boekenhoutskloof, que reúne variedades del Ródano y de Burdeos, son de lo mejor que jamás se ha vinificado en Sudáfrica. También el enoturismo se ha desarrollado más que positivamente en Sudáfrica. En pocos lugares se puede experimentar la cultura del vino de manera tan lujosa y en paisajes vinícolas tan paradisíacos como en El Cabo. Lo que por supuesto no ha desaparecido son las diferencias sociales. Hoy por hoy son tan evidentes como hace quince años. Mientras esto no cambie profundamente, Sudáfrica seguirá siendo un milagro del vino en suelo incierto. Thomas Vaterlaus «Los ensamblajes de variedades de Burdeos funcionan magníficamente en El Cabo. Sobre todo ennoblecidos con un poquito de encanto del Ródano.»“ Bernd Philippi Flying Winemaker España 7 |Septiembre 1998 Los primeros brotes verdes Totalmente ecológico: con más de 20 páginas y título en verde: con su número Especial Vinos Biológicos, VINUM se posicionaba como pionero del movimiento del vino ecológico. Lo que antes aún parecía inusual, hoy es normal: cada vez más vinos superiores se cultivan siguiendo las pautas de control ecológico. España 21 |Diciembre 2000 El señor Gaja nos retira la palabra El motivo es que “el primer embajador mundial de los vinos italianos” (según Kriesi) acababa de decidir que, en lo sucesivo, no sacaría al mercado sus vinos de pago Sperss, Sorì Tildin y Sorì San Lorenzo bajo la DOCG Barolo o Barbaresco, sino como Nebbiolo DOC. Kriesi le reprochaba que con ello sólo pretendía prevenir posibles controles, para no aparecer como un estafador; porque a un Nebbiolo DOC, al contrario que a un varietal Barolo o Barbaresco, se le puede añadir hasta un 15 por ciento de otras variedades como Cabernet o Merlot, cosa que Gaja -según las “malas lenguas” (texto original de la entrevista)– ya llevaba haciendo durante cierto tiempo para redondear su vino. Gaja reaccionó “indignado” (texto original) diciendo que él nunca utilizaría otra variedad que la Nebbiolo para sus vinos de pago. Y no sólo eso: el hecho de mover ficha hacia la desclasificación sólo tendría como fin revalorizar su Barbaresco DOCG, que para él era el vino más importante de la finca, pero que siempre había estado a la sombra de los vinos de pago. Tras esta explicación se acabó la conversación: primero la entrevista y, de momento, también las estrechas relaciones que teníamos con Angelo Gaja. Pero el tiempo, como es sabido, cura todas las heridas: en los años que siguieron, ni salió a la luz que Gaja estuviera mezclando subrepticiamente Merlot ni otros vinicultores siguieron su ejemplo en cuanto a desclasificar los vinos, lo cual habría debilitado enormemente las denominaciones Barolo y Barbaresco. Por otra parte, tampoco los vinos de pago de Gaja sufrieron por la desclasificación: hoy son tan populares o más que antes. ¿Y la relación con VINUM? Tras haberme hecho cargo de la corresponsalía en Italia, después de Rolf Kriesi, siguieron siendo frías. Tuvieron que pasar algunos años –también por falta de ocasión– hasta que pude volver a sentarme a una mesa con Angelo Gaja para entrevistarlo. Estaba más convencido que nunca de que había hecho bien en desclasificar ese vino, sobre todo para revalorizar su Barbaresco. Ni una palabra mencionamos sobre la antigua controversia o la interrupción de nuestras relaciones. Y desde entonces, conversamos con regularidad. Así es como debe ser, y Angelo Gaja sigue siendo hoy uno de los embajadores más relevantes del vino italiano. El vino italiano –y VINUM– se perderían algo sin él.» Christian Eder Las hileras de vides, como trazadas a cordel con hasta diez mil plantas por hectárea, ya lo dicen todo. La vinicultura es un monocultivo, por principio. ¿O no? Hace veinticinco años, las cepas crecían por todo el mundo sobre la tierra baldía. Cada brizna de hierba, cada brote se eliminaba entonces con herbicidas. Hoy, plantar verde entre las viñas es imprescindible para cualquier vinicultor que se precie. Y más aún: los vinicultores comprometidos, plantando la máxima biodiversidad, se afanan por que el viñedo sea cada vez más un “ecosistema autorregulado” en el que se lucha contra los parásitos por medio de sus enemigos naturales y el vinicultor limita sus intervenciones al mínimo absoluto. Lo que hace apenas treinta años se tachaba burlonamente de idea descabellada de algunos gurús de la ecología, hoy está considerado como una perspectiva realista. Con su número Especial Ecología en el año 1998, VINUM se apuntó al color verde en el momento exacto en que era previsible que el cultivo ecológico no iba a menoscabar la calidad, sino que más bien podía mejorarla. En los años que siguieron, cada vez más vinicultores superiores han ido reconvirtiendo sus fincas al cultivo biodinámico según los principios de Rudolf Steiner, lo que condiciona un trabajo más espiritual e integral en el viñedo, que también tiene en cuenta las fuerzas y ciclos de la Luna y las constelaciones de estrellas. En Alsacia, en Borgoña y en el Burgenland austriaco han sido tantos los vinicultores que se han reconvertido al cultivo biodinámico, que ya puede hablarse de un movimiento geográficamente extenso. A pesar de todo ello, ni nosotros ni los vinicultores tenemos motivos para dormirnos en los laureles todavía. En conjunto, el porcentaje de la superficie mundial de viña que se cultiva de modo controladamente biodinámico todavía es muy pequeño. Además, los defensores del cultivo enteramente biodinámico exigen aún más control consecuente en el viñedo. De hecho, las grandes variedades nobles europeas como Riesling, Chardonnay, Cabernet o Pinot Noir, tras la infiltración del hongo del mildiú hace 130 años, se han convertido en plantas muy propensas a las enfermedades, que nunca podrían sobrevivir sin protección. Una alternativa podrían ser las nuevas variedades resistentes recientemente cultivadas, que sin duda son capaces de producir vinos de calidad atractiva. ¿Pero estarán los vinicultores y los consumidores preparados para una ecorrevolución tan radical? VINUM informará. Thomas Vaterlaus Pues sí que estaba enfadado el señor Gaja: Angelo Gaja, ¿ha traicionado usted al Barbaresco?, titulaba VINUM en 2000. El editor Rolf Kriesi la armó buena en una entrevista con el productor piamontés. España 39 |Diciembre 2003 Sabores en extinción Recuperación de varietales Al reclamo de la biodiversidad, los viticultores reviven la riqueza del pasado La mayor satisfacción del equipo de VINUM a lo largo de toda su trayectoria ha sido descubrir a los lectores temas y tendencias que al poco se convertirían en puntales, en motores vanguardistas, del panorama vinivitícola. El de las variedades fue, junto con el terruño, uno de los imprescindibles. Frente a la importación de variedades foráneas que en un primer momento llegaron a calificarse oficialmente como “mejorantes”, los viticultores más sensatos acudieron a hacer arqueología en viñedos olvidados y a recuperar variedades que, por su baja productividad o delicadeza, habían dejado de cultivar. Otras, por ejemplo las prefiloxéricas insulares, seguían vivas pero desconocidas allende los mares. Este número sirvió de pedestal a la Callet, Baboso Negro, Garrut, Marmajuelo, Juan García, Vigiriega, Tintilla... En fin, a esa fruta autóctona, adaptada a la tierra desde tiempo inmemorial y que, de promesa, ha pasado a ser una realidad convertida en vinos personalisimos.u0008 Ana Lorente España 44 |Noviembre 2004 Cuidamos su imagen En VINUM cuidamos especialmente la fotografía. Huimos del lugar común de la nariz en la copa. Catando un vino en un colchón sobre una pila de barricas. Una foto sorprendente. La publicamos en un número sobre el desembarco de capital ajeno al mundo vinícola en Ribera del Duero (VINUM 44, noviembre 2004. Crecimiento explosivo). Costó dos horas de charla con Pablo González Beteré para conseguir que posase de esta guisa, por lo que le damos las gracias. En VINUM siempre se ha cuidado especialmente la fotografía, intentando huir, en la medida de lo posible, del lugar común de la nariz dentro de la copa. Cuando visitamos bodegas para un reportaje y nos ven con cámara en ristre, el primer impulso es correr a por una copa y llenarla de vino. Se aferran a ella como náufragos a la tabla de salvación, y antes que digas nada ya han compuesto la figura, la nariz dentro de la copa, con gesto de explorador. Es la foto normal. Preferimos fotos no tan normales. Por ello también damos las gracias, entre muchos otros, a Paco Hurtado de Amézaga por dejarse coronar con uvas Cabernet Sauvignon (VINUM 14, noviembre 1999); a todos los personajes que vestidos de riguroso frac se prestaron a enmarcar uno de sus mejores viñedos (VINUM 7, septiembre 1998. Señores de las uvas); a Manuel Raventós i Negra, al que reemplazamos sus ojos por dos corchos (VINUM 68, noviembre 2008. «Esta portada casi me cuesta mi puesto de consejero en La Caixa…», comenta dos años más tarde, entre risas); a Antonio Sanz, que consintió que su hijo Ricardo le rompiera una botella (de las de cine, hecha de azúcar) sobre la cabeza, en el reportaje Relevo generacional. Caña al padre (VINUM 24, junio 2001); a Francesc Sánchez, al que enterramos en licorella hasta el cuello (VINUM 31, septiembre 2002), una foto sin tratar en Photoshop, aunque sí con un pequeño truco... Y si utilizamos Photoshop siempre es reconocible, como en la ya mítica fotografía de nuestro mejor cocinero Ferrán Adriá. El Picasso de la cocina (VINUM 13, septiembre 1999), donde sus ayudantes sostienen sus creaciones, o la foto en la que un viñedo español se ve amenazado por el glaciar Perito Moreno para fantasear y denunciar cómo podría afectar al mundo del vino el cambio climático (VINUM 63, diciembre, 2007). u0008 Heinz Hebeisen España 60 |Junio 2007 Los ríos: el agua se hizo vino Peregrinación, descubrimiento La roulotte en la puerta de redacción, y en el horizonte el proyecto más ambicioso. Los sombreros, las gafas de sol, las cámaras, los ordenadores portátiles a plena carga, los primeros GPS en nuestras cámaras, tan latosos, tan imprevisibles. La cita es... El Duero, o el Ebro, o el Miño y el Sil, o los escondites del Guadiana, o.... Los ríos de la península Ibérica, desde las cuatro gotas de su nacimiento hasta su majestuosa desembocadura en el Mediterráneo o el Atlántico, en España o en Portugal van desgranando, nunca mejor dicho, los secretos de su cauce y de las viñas y bodegas que los flanquean. Ríos de Vino ha sido el proyecto más ambicioso de VINUM España, un sueño, el deseo al soplar las velas del décimo aniversario de la revista. Y también ha sido una de las mayores satrisfacciones, cuando a lo largo de ocho números, de ocho intensos viajes, se convirtió en una espléndida realidad. Pisamos todas las viñas que besa el agua, nos asomamos a los miradores de todos los meadros, a las visiones más escarpadas, a las terrazas de viñedos imposibles. Los guías eran generalmente los bodegueros enamorados de su tierra, de sus paisajes y sus labores. Aquellos que, como un milagro, son capaces de transformar el agua (ese bien escaso en esta geografía sureña) en vino, en grandes y pequeños vinos, en mitos o en secretos recónditos y locales, pero siempre amados. Los reportajes reunieron una completa información del vino y sus protagonistas, presentados en su entorno, en el paisaje, en la envoltura histórica, geográfica, turística y gastronómica. Y sorprendió sobre todo su presentación, ya que además de la revista impresa permitían acceder a la versión on-line. La colaboración con el archivo de fotos de Iberimage permitió a los lectores convertirse en espectadores y seguir a vista de pájaro cada detalle de cada recorrido. Aun hoy, el viaje sigue ofreciendo todo su atractivo, no hay más que acceder a la web de VINUM desde www.opuswine.es. El recorrido es un completo retrato de la viniviticultura ibérica a través de 132 bodegas. No hay que olvidar que la cultura, entre la que el vino es aquí un exponente, se ha desarrollado desde sus albores a la orilla del agua, a la vera de esos cauces que riegan la agricultura y difunden las sociedades y los conocimientos. Ése ha sido el descubrimiento. El vino diverso y sin fronteras, el que ahora buscamos con la serie actual Islas de Vino. u0008u0008Ana Lorente España 70 |Febrero 2009 Bodegas, de puertas afuera Botas de campo Los enólogos cuelgan su bata de laboratorio y se lanzan a la viña. En estos 13 años de edición española, VINUM ha asistido, y a veces como comadrona, al advenimiento de transformaciones radicales. Los comertaristas, catadores y, en general, seguidores del mundo del vino aún recordamos los tiempos en que la visita a cualquier bodega moderna empezaba en el flamante laboratorio y se prolongaba frente a los pulidos depósitos de acero con camisa. Despues llegaría la fascinante contemplación del ordenador de control y sus procesos y, por fin, más tarde, esa fase que ahora parece tan evidente: los enólogos descubrieron que el vino se hace en el campo y cambiaron sus aperos científicos por un vehículo 4X4. Ahora la visita, llueva o nieve, sea invierno de cepas peladas o plena canícula a pleno mediodía sudoroso, comienza por el campo, por el placer de recorrer esos dominios que han plantado con conocimiento y capricho -clones, orientaciones, vientos...- que cuidan con mimo ecológico y con el apoyo de artilugios ingeniosos: dendrómetros, fotos de satélite, analizadores de humedad, goteos controladísimos... Todo eso reunió este número, en palabras, en imágenes descubridoras de los propios responsables de una docena de bodegas diseminadas por toda la geografía española. u0008u0008 Ana Lorente España 79 | Diciembre 2010 Renovación: Hoy empieza el mañana Los hábitos de los lectores cambian. Una editorial viva ha de ser capaz de olfatear tendencias incluso antes que ellos... y actuar. Hay que deshacerse del peso del roble! Así lo decidió VINUM internacional y emprendimos la tarea de darle un rostro nuevo a la revista: un VINUM más fresco y más emocionante desde el punto de vista visual, más variado en sus contenidos. Nuevas secciones, nuevos autores, un planteamiento más amplio sin perder profundidad y, sobre todo, más cercano a la vida y al lector y completamente interactivo on-line. Eso es lo que se ve, pero la renovación de VINUM España es mucho más profunda, la sociedad empresarial y la editorial acusan el tiempo y reclaman savia nueva. Lo más importante, visible y entusiasmante, es la incorporación inmediata de la nueva directora editorial, una figura de la talla de Cristina Alcalá, socióloga, escritora, comentarista y especialista en vinos a través del Máster en Enología y Viticultura y de una intensa experiencia en el sector, que pasa por la dirección de ferias especializadas como la internacional Iberwine. Y sobre todo, una mente despierta y profunda que conoce tan bien al vino como al lector. Cristina, ¡bienvenida al equipo! u0008u0008Bartolomé Sánchez ¿Quiere ver todas nuestras revistas en su formato original? Puede descargar los números de VINUM en formato PDF desde nuestra web: http://vinum.mivino.info/es/numeros_anteriores.jsp

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