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La bodega Más que Vinos firma una de las presentaciones más certeras que hemos leído últimamente: "Creadores de recuerdos desde 1999", ese es su bello oficio. Este apasionante proyecto cuenta la historia de tres amigos enólogos –Margarita Madrigal, Alexandra Schmedes y Gonzalo Rodríguez– que decidieron cruzar sus trayectorias en el pequeño pueblo toledano de Cabañas de Yepes para poner en valor el potencial de las variedades autóctonas de Castilla La-Mancha. Sus 35 hectáreas de viñas viejas (de Cencibel, Garnacha, Malvar y Airén; algunas de ellas con más de 80 años), cultivadas en vaso y en ecológico, hunden sus raíces en suelos arcillo-calcáreos a 750 metros de altitud. De estas parcelas tan singulares nacen sus dos líneas de vinos: Ercavio –su nombre proviene del yacimiento arqueológico de Ercávica– y las originales Ediciones Limitadas. Como El vino de Antes, donde la Malvar y la Airén envejecen envueltas en su propio velo a un ritmo lento y delicioso; La Plazuela, un emocionante coupage de Cencibel y Garnacha que rinde homenaje a la antigua y renovada bodega familiar; o Los Conejos Malditos, un atrevido coupage de Malvar y Airén que nace de las viñas que más sufren los ataques de estos animalillos. Incluso cuentan con tres vinos de película, creados junto a los hermanos Almodóvar. Rodeados de olivos centenarios, también elaboran el aceite de oliva virgen extra ecológico Ercavio –D.O.P Montes de Toledo– con aceitunas de la variedad Cornicabra recolectadas a mano. Este aceite tan especial –se necesitan 7,5 kilos de aceitunas para elaborar 1 litro– es aromático, afrutado y persistente, "un acompañante ideal del pan, ensaladas, arroces, pastas, pescados y carne". ¡Normal que los conejos no quieran perdérselo!
