Política sobre cookies

Utilizamos cookies propias y de terceros, así como los datos de la conexión del usuario para identificarle. Estas cookies serán utilizadas con la finalidad de gestionar el portal, recabar información sobre la utilización del mismo, mejorar nuestros servicios y mostrarte publicidad personalizada relacionada con tus preferencias en base a un perfil elaborado a partir de tus hábitos y el análisis de tu navegación (por ejemplo, páginas visitadas, consultas realizadas o links visitados).

Puedes configurar o rechazar la utilización de cookies haciendo click en "Configuración e información" o si deseas obtener información detallada sobre cómo utilizamos las cookies, o conocer cómo deshabilitarlas.

Configuración e información Ver Política de Cookies

Mi Vino

Vinos

CERRAR
  • FORMULARIO DE CONTACTO
  • OPUSWINE, S.L. es el responsable del tratamiento de sus datos con la finalidad de enviarles información comercial. No se cederán datos a terceros salvo obligación legal. Puede ejercer su derecho a acceder, rectificar y suprimir estos datos, así como ampliar información sobre otros derechos y protección de datos aquí.

El ciclo de la vida

9B6P3E8M8P1M1G8R5Q4P5G3O7B0L1J.jpg
  • Redacción
  • 2018-10-16 00:00:00

El otoño trae consigo el cambio de ropaje de la naturaleza. El fruto ha sido recolectado, el verde de las cepas ha cambiado su tonalidad por un rojizo hermoso, el cielo comienza a anunciar las primeras lluvias y el viento provoca las ganas del primer jersey de punto. Esta es la postal previa a la llegada de los fríos invernales, de los campos de vid con sus cepas retorcidas y despeluchadas y del gris horizonte. Así es el ciclo de la vida: se nace, te reproduces y mueres. Pero ¡milagro! esto no sucede igual con el vino. Este ser que fue fruto y después mosto y más adelante vino... duerme plácido en su botella hasta que alguien la descorcha, entonces, como si fuera el genio de la lámpara, sale para –esta vez sí– morir en nuestra boca, pero resucitar en nuestro recuerdo.
Acabo de llegar de los campos de vides de Napa Valley y Sonoma en California, donde la tierra aparece perfectamente peinada repleta de cepas nuevas. En esos campos, la vid no llega a superar los 25 años de vida. Entonces se las considera viejas, se arrancan y se vuelve a plantar una cepa nueva. Cosa contraria pasa en nuestro país: cuantos más años, mejor. Esto hace único al viñedo español. Presumimos con razón de tener bodegas con 100 o más años que durante toda su historia nos han ido dejando verdaderas joyas.
Durante este mes, he visto a mi compañero Antonio Candelas descorchar 45 referencias de lujo procedentes de 45 bodegas centenarias españolas. Os puedo asegurar que, si hay un genio escondido en una botella, lo encontraréis en cualquiera de estos vinos. ¡Y a por muchos más!

enoturismo


gente del vino