• Redacción
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• 2003-02-01 00:00:00

Dicen los expertos de turismo, que para vender bien un producto de viajes hay que tener una imagen del lugar ofertado de primera calidad. Y si además de tenerlo, como es nuestro caso, el establecimiento se encuentra en el corazón de la Ribera del Duero, mucho mejor. Si además de haber construido un Hotel temático del vino, con 38 habitaciones, 2 suites con hidromasaje, aire acondicionado y conexión a internet en todas las habitaciones, horno de leña, gimnasio, garaje, zonas ajardinadas, rodeado de viñedos, decorado con barricas de las bodegas más importantes de la zona, realzando su planta noble con una viga de lagar de 2.000 Kg y rematado con el rincón del gourmet que cuenta con todos los vinos de la Ribera ( crianzas, reservas y grandes reservas), gozamos de una riqueza cultural y paisajística excepcionales que engloba por su proximidad a la provincia de Burgos, Soria y Valladolid, no hay razón alguna para no visitarnos. Además de visitas a bodegas y catas dirigidas, ofrecemos la visita a las Bodegas Subterráneas del S. XIV-XV en Aranda de Duero, una red de galerías cuya finalidad fue la de elaborar y almacenar las grandes cosechas de vino que desde la Edad Media vienen produciéndose en nuestra ciudad. Se consideran una perfecta obra de ingeniería, manteniendo todo el año una temperatura fluctuante entre los 11 y 13 grados, y un nivel de humedad constante conseguido gracias a una perfecta ventilación producida entre las escaleras y las zarceras. Visitaremos el Castillo de Peñafiel, conocido como el Barco de Castilla por su forma, con una longitud de 210 metros por una anchura de 20. Documentado en el S. XI, fecha en la que el conde castellano Sancho García lo reconstruyó, más tarde perteneció al ilustre don Juan Manuel, autor del Conde Lucanor, quien lo donó al monasterio dominico de San Pablo. En el s. XV, don Pedro Girón reedificó la fortaleza. Y veremos también su Museo Provincial del Vino, las diferentes salas muestran los distintos procesos de fabricación del vino, desde que la uva nace en el viñedo hasta el consumo, en la planta baja del museo de explica la planta dela vid, la viticultura, la vinificacion, los artesanos del vino, los útiles de medida, la crianza y la reserva, los consejos prácticos para degustar los diferentes vinos, la cata, la calidad, el consumo y comercialización. En la planta superior se explica el vino y la relación con la mitología, con la Historia, la literatura y el Arte, y con las fiestas y la gastronomía. Están representadas en el Museo las denominaciones de origen: Ribera del Duero, Cigales, Rueda y Toro. Tendremos también tiempo para visitar Peñaranda de Duero con la famosa Botica de los Ximeno del s. XVIII fundada por Lucas Ximeno y en donde después de ocho generaciones, sus descendientes han mantenido su legado, el Palacio de los Zúñiga y Avellaneda del s. XVI, con portada plateresca y en su interior un patio con doble arquería, artesonados góticos, mudéjares y renacentistas. La Plaza de los Condes de Miranda con un Rollo en el centro de la misma del s. XVI, la Iglesia de Santa Ana y el Castillo del s. XV dominando la villa, largo y esbelto. Podemos acercarnos también a las Hoces de Riaza o el Cañón de Río Lobos, o lugares cargados a la vez de belleza y de historia como Santo Domingo de Silos, Covarrubias, La Vid.