Política sobre cookies

Utilizamos cookies propias y de terceros, así como los datos de la conexión del usuario para identificarle. Estas cookies serán utilizadas con la finalidad de gestionar el portal, recabar información sobre la utilización del mismo, mejorar nuestros servicios y mostrarte publicidad personalizada relacionada con tus preferencias en base a un perfil elaborado a partir de tus hábitos y el análisis de tu navegación (por ejemplo, páginas visitadas, consultas realizadas o links visitados).

Puedes configurar o rechazar la utilización de cookies haciendo click en "Configuración e información" o si deseas obtener información detallada sobre cómo utilizamos las cookies, o conocer cómo deshabilitarlas.

Configuración e información Ver Política de Cookies

Mi Vino

Vinos

CERRAR
  • FORMULARIO DE CONTACTO
  • OPUSWINE, S.L. es el responsable del tratamiento de sus datos con la finalidad de enviarles información comercial. No se cederán datos a terceros salvo obligación legal. Puede ejercer su derecho a acceder, rectificar y suprimir estos datos, así como ampliar información sobre otros derechos y protección de datos aquí.

La esencia del Penedés

  • Redacción
  • 1997-12-01 00:00:00

EI brandy del Penedés ha obtenido en los últimos años un progresivo reconocimiento en España y en todos los países donde se consume y aprecia el destilado de vino. La última manifestación de este reconocimiento ha sido el triunfo sorprendente e incontestable de un brandy catalán frente a los mejores “cognacs” del mundo. En efecto, “Torres 20 Hors d’Age” fue elegido el mejor brandy del mundo en la rigurosa cata a ciegas de brandies y cognacs organizada por la International Wine and Spirit Competition para la feria VINEXPO de Burdeos. En esta cata también participaban los más prestigiosos y conocidos cognacs franceses. El brandy de bodegas Torres se impuso claramente a sus competidores con la mayor puntuación de todos los participantes en este concurso: nada menos que un 90,6/100 del trofeo Oude Meester. Torres 20 Hors d’Age conquista así el rango de Mejor Brandy del Mundo, con Medalla de Oro, algo verdaderamente insólito si tenemos en cuenta la categoría de los participantes en el concurso. Es la primera vez en la historia del brandy español que tal cosa ocurre, sentando un precedente que rompe con los tabúes y malas imágenes de esta bebida, durante demasiados años considerada una imitación del brandy francés.
Quizá se cometió, en un principio, allá por la década de los 50, el error de afrancesar excesivamente la imagen de los brandies catalanes. En descargo de nuestros predecesores podría alegarse que eran tiempos de una total autarquía, y los “cognacs” franceses gozaban de un gran prestigio e, incluso, de buen número de adeptos desde mucho antes de la Guerra Civil. El brandy catalán, en muchos aspectos, es más similar al cognac francés que al brandy jerezano. El brandy Torres se elaboró desde un principio con los vinos más ácidos y menos alcohólicos del Penedés. La destilación utilizada fue también, en muchos casos, la tradicional de la Charente, que permite recoger todos los delicados matices de los vinos jóvenes de nuestra región. Los brandies Torres han conseguido en estos años una sólida imagen de prestigio y de calidad, íntimamente ligada a las características tradicionales de su peculiar aroma y paladar. E incluso, pese a su limitada producción, en varios países de Europa y América han conseguido iniciar una introducción progresiva y exitosa.
Se agrupan hoy en dos grandes bloques, dependiendo de su sistema de destilación: Brandies obtenidos por la destilación llamada “continua” o tradicional, por medio de una columna rectificadora, que permite la obtención de las tradicionales holandas a unos 65°. Estos brandies se obtienen siempre por la destilación de vinos de la región elaborados con las uvas Parellada, Xarel.lo y Macabeo. Posteriormente a su destilación se envejecen por el sistema de soleras en barricas de roble americano. El otro bloque es el de los brandies obtenidos por el sistema de doble destilación o “Charentais”. En este caso se destilan tan sólo los vinos obtenidos con Parellada o bien con Ugni Blanc (también conocida como Saint-Emilion), y que es una cepa tradicional de la región de Charente (Francia). El destilado que se obtiene es el clásico “eau de vie” o agua de vida, y que tiene unos 70°. La crianza tiene lugar en barricas de roble francés procedentes de los robles de Limousin, y se utiliza el método estático, es decir, sin trasiegos entre los destilados más jóvenes y los más viejos. La gama completa está así constituida por el popular Torres 5 años Solera Selecta, de paladar intenso, sedoso y concentrado; el Torres 10 años Gran Reserva, un clásico de paladar ampuloso y persistente; Fontenac, el primero de la gama alta, elegante y profundo; Miguel Torres, todo un símbolo de la centenaria tradición familiar, cuyo aroma profundo y paladar aterciopelado dan fe de su noble origen; Miguel I, un Gran Reserva de nariz intensa muy especiada; y el Honorable, en botella de cristal tallado, una joya de prolongada crianza.

enoturismo


gente del vino