• Redacción
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• 2010-12-01 00:00:00

Italia VINUM INTERNACIONAL, noviembre 1993, 4 estrellas Barolo Sperss 1989 Angelo Gaja, Piamonte El Sperss salió al mercado en los años ochenta todavía como Barolo. Sólo en los noventa Angelo Gaja se decidió a desclasificarlo, junto con otros vinos de pago, a Langhe Nebbiolo. Pero como vino de un solo viñedo, el Sperss siempre estuvo un poco a la sombra de sus hermanos, sobre todo del Sorì San Lorenzo, el cru más conocido de Gaja. En algunas añadas, por ejemplo 1989, este varietal de Nebbiolo muestra su verdadera grandeza, hasta hoy subestimada... Hasta hoy: rubí brillante; en la nariz, tras varias horas de aireación, un popurrí de aromas, frambuesa, violeta y ciruela madura sobre especias exóticas, que alcanza incluso notas de chocolate; el principio complejo, lleno, con mucho carácter pero también finura, la acidez en perfecto equilibrio con los excelentes taninos. Se corona con un final de seductora fruta, notas de madera bien integrada, pero sobre todo mucho, mucho brillo y longitud. En una cata a ciegas, ¡bien se le echarían diez años menos! (che) Alemania No ha sido publicado en VINUM Riesling G-Max Qualitätswein 2009 Weingut Keller, Renania En el caso de los vinos secos de Alemania, siempre nos movemos en el ámbito de los 18 puntos y poco más. Pero la máxima calificación todavía no se había otorgado, hasta ahora. Desde que en agosto de 2010 en una visita a la finca vinícola superior Keller, caté el nuevo Riesling G-Max. Este vino tiene dos padrinos: Georg Keller, el bisabuelo del vinicultor Klaus-Peter Keller, que supo reconocer en su día el potencial del viñedo superior Dalsheimer Hubacker. Y Max (Maximilian) es el nombre del descendiente más joven de la familia. La primera añada fue la de 2001. Entre tanto, este vino ha alcanzado el estatus de culto y un precio respetable (actualmente 115 euros en la finca, pero hace tiempo que está agotado y sólo se puede adquirir en los comercios especializados). La añada de 2009, de la que se han embotellado 1.450 botellas, puede que sea la mejor hasta la fecha. Aromática tremendamente delicada con mucho especiado y frutalidad fina y elegante; mucho potencial, literalmente vibra en el paladar, largo, rico en matices, magnífico juego de la acidez, ¡mejor imposible! Así que 20 puntos! (kn) Austria VINUM INTERNACIONAL, junio 1988, 18 puntos Blaufränkisch Mariental 1986 Weingut Ernst Triebaumer, Mittelburgenland El vino austriaco xperimentó un big bang en verano de 1988. Por vez primera, se concedió la nota máxima de 20 puntos a un varietal de Blaufränkisch en un jurado internacional de VINUM con representantes de Alemania, Suiza y Austria. Este vino solía moverse alrededor de los 18 puntos, pero posiblemente se debiera a ciertas reservas por parte de los catadores. Aun así, el resultado era lo bastante bueno como para que este Blaufränkisch profundamente oscuro y con el brillo de un Riede Mariental llegara a ser de culto, lo cual dio un tremendo impulso a la carrera del tan reservado Ernst Triebaumer, un hombre más bien apegado a la naturaleza. ¿Y cómo es hoy este vino? En la finca del Burgenland, Ernst Triebaumer –que desde hace unos años delega el trabajo de bodega en sus hijos Gerhard y Herbert– me hizo catar la añada de 2007 (va a ser un gran vino, pero hay que guardarlo al menos diez años), luego la de 2003 (tremendamente concentrado, complejo y definido) y finalmente la de 1986: delicada crianza, que con la aireación da paso a una clara fragancia de zarzamora con una pizca de café, fruta presente, suave materialidad, enorme especiado, muy complejo, todavía en muy buena fase. Merece los 20 puntos. (kn) Francia: No ha sido publicado en VINUM Châteauneuf-du-Pape 1990 Château de la Gardine, Ródano No confiaba en que este vino tuviera una vida larga. Pero me equivoqué. La botella (que saqué de la bodega para acompañar una pizza, porque pensé que de todas formas estaría pasado) era de una complejidad, mineralidad y frescor que prácticamente me dejaron anonadado, con taninos aún despiertos pero finos como cabellos y un final interminable, frutal-especiado. Estoy seguro de que hace veinte años habríamos calificado este vino con 17 ó 18 puntos como máximo; hoy merece los 20. (rbb) Argentina VINUM INTERNACIONAL diciembre 1999, 19 puntos Malbec 1977 Bodega Weinert, Mendoza Weinert es el dinosaurio de las bodegas argentinas. Allí todavía se elabora la Malbec en grandes cubas, y no en barricas que ceden aromas de roble. La añada de 1977 no llegó al mercado suizo hasta finales de los noventa, tras una crianza de casi veinte años. El primer embotellado era sencillamente fantástico. Un vino con taninos enormes, pero plenamente madurados, y una acidez presente y jugosa. Obviamente llegaron al mercado otros embotellados posteriores de este vino que no estaban a la altura del primero. Aun así: aunque ya han pasado más de diez años desde que caté este vino por última vez, lo recuerdo como si hubiera sido ayer. Aunque sólo fuera por eso, merece los 20 puntos. (tv) California VINUM INTERNACIONAL julio 2009, 18 puntos Chardonnay 2004 Marcassin Vineyard, Sonoma, California Probablemente habrán de pasar algunos años hasta que un Chardonnay de California reciba a la primera los 20 puntos de VINUM. Para esta variedad, las notas más altas aún están reservadas a los crus de Meursault y Montrachet. Aunque el Marcassin se muestra un poco más potente, opulento y alcohólico que sus modelos borgoñones, la estructura y la complejidad son igualmente convincentes. Y desde que me invitaron en privado a catar un Marcassin Chardonnay de diez años de edad, conozco la gran capacidad de evolución de este cru. Sería interesante comparar este cru de Sonoma, dentro de otros diez años, con un Montrachet. (tv) Suiza VINUM INTERNACIONAL, abril 2000, 18,5 puntos Pio della Rocca 1990 Adriano Kaufmann, Tesino Una de las catas más impresionantes en las que jamás he participado con VINUM: en la primavera de 2001, un jurado de diez personas cató una serie de diez Pinot superiores de Suiza y diez Merlot superiores de Suiza, todos de la añada de 1990. Para calibrar dónde situar estos vinos dentro del espectro internacional, se incluyeron clandestinamente en la cata algunos piratas de gran calibre de Borgoña y de Burdeos. En ambas categorías, los suizos se situaron por delante. La Cuvée Pio della Rocca de Adriano Kaufmann alcanzó, con 18,5 puntos, la máxima calificación y batió con ello también al Vieux Château Certan de 1990. Cuando un jurado de diez fanáticos del vino le otorga una nota media de 18,5, ¡en realidad habría merecido los 20 puntos! (tv)